El culebrón del convento de las monjas de Belorado, continúa. Ahora habla la única religiosa que ha abandonado esa comunidad religiosa.
Se llama Sor María Amparo, y lleva 62 años de vida religiosa.
Actualmente se encuentra en el monasterio de Castil de Lences, en Burgos.
Ha hablado para el Diario de Burgos y señala que «su salida del convento fue traumática y vigilada, impidiéndole hablar con las monjas mayores».
Decidió irse del convento de Belorado debido al ambiente que considera «sectario».
Sor María Amparo ha manifestado que «no estaba al tanto de los problemas económicos del convento», que se mencionan como motivo de la ruptura con el Papa y el obispo.
La religiosa carga contra Pablo de Rojas, el obispo sedevacantista, que está excomulgado, describiéndolo como un «fantoche».
Sor María Amparo se enfrentó a Rojas, defendiendo su obediencia al Papa Francisco y al obispo de Burgos, Mario Iceta.
También acusa a la superiora de la comunidad de no haber discutido la decisión de romper con la Iglesia en el capítulo.
Pero reza para que sus hermanas encuentren la verdad.
También agradece a los capellanes y al arzobispo Mario Iceta por su cercanía y preocupación.